lunes, 30 de junio de 2008
Eso de ser de Barcelona
Vuelvo a recordar qué es eso de querer entrar en Barcelona, pagar peaje y encontrar retenciones, meterte en la ciudad y chupar caravana, buscar aparcamiento y no encontrar, pasear por la ciudad y hacer cola para todo.
Vuelvo a recordar qué es eso de dormir en BCN en verano, que viene a ser algo parecido a meterte en un horno 6 horas a 120º. Quedas totalmente confitado en tu propio sudor, deseando caer en octubre y temiendo a tu propia cama hasta dentro de unas horas.
Vuelvo a recordar qué es eso de moverte entre personas humanas y otras no tanto, como un grano de arroz en una paella. O más bien como un grano de arroz en una bolsa de tutifruti, fuera de tiesto.
Lo que no recordaba tanto eran todas esas banderas que antes ni se veían.
Cómo han cambiado las cosas...
Vuelvo a recordar qué es eso de dormir en BCN en verano, que viene a ser algo parecido a meterte en un horno 6 horas a 120º. Quedas totalmente confitado en tu propio sudor, deseando caer en octubre y temiendo a tu propia cama hasta dentro de unas horas.
Vuelvo a recordar qué es eso de moverte entre personas humanas y otras no tanto, como un grano de arroz en una paella. O más bien como un grano de arroz en una bolsa de tutifruti, fuera de tiesto.
Lo que no recordaba tanto eran todas esas banderas que antes ni se veían.
Cómo han cambiado las cosas...
Etiquetas: Eso de
Suscribirse a Entradas [Atom]